MISIONES: Otra muerte en una obra y van...

Isidro Ismael Ramos (33) murió ayer aplastado por una mampostería cuando trabajaba en la refacción de una vivienda en el centro de Posadas (pág. 24). Es la segunda víctima mortal en cuatro derrumbes en lo que va del año en la capital provincial. No es un detalle menor. Debe haber una razón detrás de la reiteración de hechos similares.

Fue la caída de un galpón en el Barrio Hermoso, con heridos, después el derrumbe de una losa en Villa Sarita. El caso más reciente también con víctima fatal fue el alud de tierra que aplastó a dos obreros que trabajaban en la obra de la avenida Alicia Moreau de Justo. Falleció uno de ellos. Ahora otro derrumbe con esta víctima fatal. Pero Posadas tiene otros antecedentes en obras fallidas. El más recordado tal vez sea la caída del edificio de diez pisos ubicado en la avenida Lavalle casi Luchesi, años atrás. Después en el 2004 en plena construcción del Palacio de Justicia, cuando cedió el encofrado y dejó varios heridos. El drama no es nuevo. Pero, sin embargo, persiste.
La Uocra, el gremio de los obreros de la construcción, ya había planteado semanas atrás la necesidad de mayores y más eficaces controles en las obras. El esquema de regulación sólo se ocupa de verificar los planos de cada construcción y la solvencia de los profesionales que avalan esas obras -habían dicho- al pedir más inspectores en los lugares de trabajo.
Lo concreto es que hasta ahora nada se ha hecho, desde el Estado ni desde los particulares involucrados (colegios de profesionales, empresas constructoras) para evitar accidentes. Todo a un mismo precio, el de las vidas humanas.

Fuente: Empresaludng.com.ar